Deforestación y desertización












 

Deforestación

El mundo está en peligro de perder sus bosques, los cuales tienen la función de absorber la gran cantidad de dióxido de carbono existente en la atmósfera. Por ello, la deforestación o la tala abusiva de los bosques, es uno de los problemas ambientales más serios.

La destrucción de las grandes selvas tropicales, ecosistemas únicos, los más ricos y antiguos de la tierra, constituyen un grave problema en nuestros días.

Los bosques templados también están en peligro y afectados por la contaminación. Aunque en algunas zonas se están reforestando, las nuevas plantaciones guardan poca relación con la rica biodiversidad de los bosques antiguos.

Causas de la deforestación

- El cultivo itinerante de los bosques.

- La realización de grandes plantaciones de cultivos (azúcar, café, piñas, cacahuetes...) mediante la deforestación.

- La explotación minera.

- La quema de grandes extensiones de terreno para la cría de ganado.

- La extracción de madera para la construcción de viviendas y para la fabricación de papel.

- Los países en vías de desarrollo usan la madera como leña y carbón vegetal, ya que dependen de este recurso para cocinar o calentar sus casas.

- La extracción de recursos, principalmente maderas tropicales, que son exportados a países desarrollados.

 

Consecuencias

La deforestación aumenta la erosión del suelo y lo que antes era tierra de labor, ahora se está convirtiendo en suelo inerte por la erosión. La mayor parte de la tierra forestal ha sido despejada con medios de tala y quema. Después de un año o dos de cultivo, el suelo se desgasta. Los agricultores se ven obligados a dejar la tierra. Esta tierra abandonada queda sometida a graves procesos de erosión del suelo, porque no hay cubierta vegetal que las proteja contra los efectos del viento y de la lluvia. Este suelo erosionado no puede sustentar a seres vivos.

La pérdida de bosques, que ejercen un fuerte control sobre el clima, aumenta la superficie de albedo, de modo que se refleja más radiación solar hacia el espacio. Esta pérdida de energía solar podría cambiar las pautas de precipitación con un descenso de la lluvia, especialmente en las selvas húmedas.

El hollín de los incendios forestales absorbe la luz solar calentando la atmósfera. Esto produce un desequilibrio de temperaturas y hace que la temperatura aumente con la altitud, que es justo lo contrario de lo que debería ocurrir.

Se reduce la biodiversidad, los rangos y especies.

 

Desertización

La desertización, es decir, el empobrecimiento de una zona semiárida por la destrucción de los suelos y la vegetación bajo la influencia del hombre, está creciendo y extendiéndose cada vez más sobre la tierra, amenazando aproximadamente una tercera parte de la superficie terrestre.

Todos los continentes están afectados por la desertización.

Causas

- El pastoreo abusivo, como ovejas, cabras, caballos, llamas y camellos, que se comen la vegetación de base y dejan el suelo expuesto a los efectos erosivos.

- Las prácticas de irrigación inapropiadas.

- La deforestación, especialmente en las vertientes de las tierras altas.

- La sobreexplotación de los suelos pobres.

Consecuencias

La tala indiscriminada y los incendios hacen que los suelos queden desprovistos de la protección de los árboles y estén sometidos a una gran erosión.

Dificil asentamiento de plantas y animales debido a que la capa fértil del suelo es arrastrada por la lluvia y el viento.

Acumulación de sales en la superficie y pérdida de la cubierta vegetal cuando las prácticas de riego se efectúan en suelos con deficientes drenajes.

 

 

SOS Tierra