Inicio
| Mapa web |
Términos |
Signos | El
tiempo | Bibliografía
| Contacta
|Autoevaluaciones
|Juegos
|
MODELO CIRCULATORIO Las diferencias de temperatura y de presión que se producen sobre la Tierra hacen necesarios unos mecanismos de redistribución que contemplen un modelo de circulación de los vientos a escala global, a esto se conoce como circulación general de la atmósfera. Si la Tierra fuera homogénea e inmóvil, se establecería la siguiente circulación: desde los polos, el aire frío afluiría hacia el ecuador, y desde éste, el aire caliente se desplazaría hasta los polos; existirían dos centros convectivos, uno para el hemisferio norte y otro para el sur. Pero todo esto se modifica por: - La fuerza de Coriolis. - La distribución de los continentes y los océanos. - La diferencia de temperatura que hay entre continentes y oceános. - Los procesos de formación entre las masa de aire caliente y frío, dando lugar a la formación de ciclones y anticiclones. La Tierra se mueve, gira alrededor de su eje, lo cual produce una desviación (por la fuerza de Coriolis) de todas las trayectorias del viento, y así impide que el aire polar llegue al ecuador. Se produce entonces una circulación atmosférica relacionada con los sistemas de presión y los vientos dominantes:
Dos sistemas de vientos circulan en altura: vientos del oeste, entre los polos y las latitudes tropicales, aquí está incluida la corriente del chorro; y, otro sobre la zona ecuatorial de vientos del este. Pero, la Tierra, además de girar sobre su eje, no es homogénea. Se produce una circulación general atmosférica teniendo en cuenta la distribución de los continentes y océanos, de los cambios de presión superficial. En
el hemisferio norte, debido a la existencia de enormes masas continentales,
el frente polar (asociados a los vientos del oeste) experimenta grandes
distorsiones. La
corriente en chorro también presenta cambios estacionales. |
Inicio
| Mapa web |
Términos |
Signos | El
tiempo | Bibliografía
| Contacta
|Autoevaluaciones
|Juegos
|