¿Quién fue Santa Claudina?
En una ciudad de Francia, llamada Lyon, vivía la familia Thévenet: el padre Filiberto Thévenet, la madre Mª Antonieta Guyot de Pravieux y su hijo Luis. La familia se dedicaba al negocio de la seda, eran muy emprendedores. |
EL 30 de marzo de
1774 nació la segunda hija de esta feliz familia, y al día
siguiente la bautizan en la iglesia de Saint-Nicier. La ponen de nombre
Claudina.
|
Glady, como la llamaban en casa, vivió feliz al lado de sus seis hermanos. Pronto aprendió de su padre la sensibilidad por los más necesitados. De su madre aprendió a tener un carácter valiente y sereno.
|
Ya desde pequeña
sabía jugar y cuidar de sus hermanos. |
En todas las casas el sufrimiento estaba presente a todas las horas. La familia Thévenet también sufrió mucho. |
Luis y Francisco, de 20 y 18 años, fueron detenidos y encarcelados. Claudina, disfrazada, acudía muchas veces a la cárcel a ver a sus hermanos para llevarles cariño, ropa y comida, que ellos compartían con otros detenidos. |
El día 5 de
enero de 1794, cuando Claudina llegó a la cárcel, se encontró
con una fila de presos que iban a ser fusilados. "Perdona como nosotros perdonamos" y enseña a sus hijos. Estas palabras vibrarán en el bondadoso corazón de Claudina a lo largo de toda su vida. |
Cuando la familia Thévenet descubrió quién los acusó, lo perdonaron, tal como ellos habían pedido. Después de la guerra, Francia quedó destruida y muchos niños y niñas quedaron sin hogar y sin familia. Ella pensó mucho toda aquella situación y sobre todo las palabras de sus hermanos. Pensaba: ¿qué podría hacer yo por los demás? |
En 1815 muere el padre
de Claudina. - Estupendo, Claudina. Necesitamos gente como tú. Un día el padre Coindre le presentó a dos niñas huérfanas para que las cuidase. Ella se hizo cargo de las niñas. - Ya sé lo que haré: COLEGIOS. |
Pronto se incorporaron cinco niñas más. Piden ayuda a María Chirat, amiga de Claudina, quien cede un piso de su casa para cuidarlas y educarlas. La casa de María se llamará "La Providencia", aquí se enseñaba a las niñas a leer, escribir, coser y manejar un telar, para que fueran capaces de desenvolverse en la vida. Claudina a la vez que ayuda en La Providencia tiene que atender a su madre, Mª Antonieta, a quien quiere mucho. Pero... |
Claudina siente que su corazón tiene que dar un paso más en su entrega a Dios y a los demás y así deja la casa de sus padres, el 5 de octubre de 1818, para instalarse en Pierres-Plantées y formar la Congregación de Religiosas de Jesús-María. |
|
Las religiosas se van organizando cada vez más. La alegría de Claudina y sus compañeras es grande al poder vivir unidas, entregadas desinteresadamente a los demás. El 28 de mayo de 1820 muere su madre. Se va confirmando su fe y fortaleza ante las dificultades. En el colegio, Claudina acoge personalmente a las niñas, y se ocupa de lavarlas, peinarlas y vestirlas. Las religiosas enseñaban a las niñas a leer, escribir, contar, coser... y a querer mucho a Jesús y a María. |
A pesar de la serenidad y fortaleza de Claudina, sus fuerzas físicas iban decayendo. Un día se puso muy enferma y murió el 3 de febrero de 1837. Sus últimas palabras fueron: - ¡Qué bueno es Dios! Las religiosas lloraban. |
|
|
Los ángeles la recibieron en el cielo muy contentos. |
Después, las Religiosas de Jesús María viajaron por todas las partes del mundo, para fundar colegios. El primer grupo de misioneras sale de Lyón en 1842 hacia la India. A España llegaron en 1850. |
|
Ahora, todas las personas que nos educamos en los colegios fundados por tí te decimos: - Gracias Claudina, por la Congregación de JESÚS MARÍA Hoy sigue vigente el proyecto de vida de Santa Claudina a través de las religiosas y seglares que se dedican a la educación, para acercar los valores de la Santa a los niños y niñas y a la juventud. |