En estas llegó Campanilla, y al ver tan mal la cosa, empezó a comer letras y más letras. El tiempo empezó a pasar muy deprisa, y entró en erupción un volcán. Los piratas asustados por la lava y por el fuego, huyeron, pues eran unos miedicas.

Peter Pan salió del agua por enésima vez y dijo:
—Rumbo a Londres.

Entonces aparecieron, la niña con la que se había encontrado antes Elena, que se llamaba María, los hermanos de Maria, Juan y Víctor, y por último, los niños perdidos con el Tesoro del Capitán Garfio.

Campanilla, que era muy fuerte, levantó el barco, salieron de una estrella, cruzaron el mar y aparecieron en Londres.

Ahí a Elena la tiraron por la borda, debido a la niebla, ya que no veían ni torta y la pobre Elena acabó en el 3 del Big Ben. Por fin, cuando consiguió bajar, vio el ansiado FIN.
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